Querida amiga, si estás en proceso de restauración después del pecado sexual; no debes olvidar que la restauración de tu vida incluirá la sanidad con tu familia.

Es cierto, debes aprender a sanar relaciones con mujeres. Generalmente, cuando una mujer busca satisfacción emocional a través de relaciones sentimentales; las amigas mujeres es en lo último que se piensa. Es poco probable que existan amigas verdaderas y las que tienes, en su mayoría te animan a continuar con el pecado sexual.

Las relaciones con los hombres es lo más complicado (no imposible) de sanar porque debes aprender a tener amigos y no ver a los hombres como medio para hacerte sentir amada o deseada. Debes aprender a tener amistades sin incluir el pecado sexual.

Y también, será necesario sanar tus relaciones familiares.

La familia es el primer vínculo que tenemos para sentir amor verdadero, sano y profundo. Una familia sana emocionalmente, te enseña a tener relaciones emocionalmente sanas.

Nuestro papá, es la figura que nos enseña a dar y recibir amor con un interés genuino. Tu padre es la persona que debió enseñarte sobre las relaciones con hombres. Si tu papá te afirmó, te validó y se dedicó a llenar tu corazón; será poco probable que te encuentres en relaciones enfermizas. Un corazón sano, lleno y pleno no tiene necesidad de buscar amor en otro lado.

Los hermanos hombres, también juegan un papel importante. Ellos te enseñarán a relacionarte amistosamente con los demás. Su compañía y respeto te dará un panorama de cómo es un amigo hombre. Los hermanos hombres también saben proteger el corazón de sus hermanas, saben cuidarlo y valorarlo.

Nuestra mamá, es la figura que nos enseña cómo comportarnos como mujeres, además que su cuidado y protección llenan nuestro corazón femenino de una forma impresionante. Tu mamá debió enseñarte a ser una mujer dedicada, piadosa, generosa, que se da a respetar en cualquier lugar donde se encuentre. La mamá también enseña que las mujeres somos seres relacionales que nos apoyamos unas a las otras. Una mujer, nunca debe destruir a otra mujer. Al igual que tus hermanas; ellas debieron ayudarte a formar relaciones de amistad con otras mujeres.

Y bien, ¿cómo te sientes con la descripción de familia que acabas de leer? Respira. Puedo entender perfectamente que el mayor daño emocional que recibimos viene directo de nuestro núcleo primario. Es totalmente comprensible que nuestro corazón busque lo que no recibimos en otro lado. Reconocer este punto te ayudará a ser responsable con tus acciones. Es cierto: no tuviste este primer cariño en casa, pero esto no te da el “derecho” de buscarlo en otro lado a través del pecado.

Ahora bien, no sé cómo es tu familia. Quizá no estés en la posibilidad de restaurar las relaciones familiares al punto de convivir en paz con todos (esto dependerá de la disposición de tus familiares también). Puede ser que ya no vivas con alguno de tus padres o quizá no conozcas a alguno de ellos. O talvez, sí tienes la posibilidad de restaurar por completo estas relaciones y no sabes cómo hacerlo.

Quiero apoyarte con algunos consejos al examinar algunas familias de la Biblia. Pero primero, quiero mostrarte el corazón de una mujer que estaba pecado sexual y que se interesó genuinamente por su familia.

Luego Josué envió en secreto a dos espías desde el campamento israelita que estaba en la arboleda de Acacias y les dio la siguiente instrucción: Exploren bien la tierra que está al otro lado del río Jordán, especialmente alrededor de la ciudad de Jericó. Entonces los dos hombres salieron y llegaron a la casa de una prostituta llamada Rahab y pasaron allí la noche. Josué 2:1-2 NTV

Me llama la atención este pasaje. Los dos espías pudieron refugiarse en cualquier lado, pero decidieron hacerlo en la casa de una prostituta. El pasaje cobra sentido cuando entiendo que esta prostituta tenía un propósito eterno en la historia de la humanidad. Similar al encuentro de Jesús con otras mujeres pecadoras, esos encuentros tuvieron consecuencias entrenas.

Querida amiga, si en tu pasado has recurrido al pecado sexual; un encuentro con Jesús puede traer un cambio radical a tu vida y a tu futuro. No te sientas culpable delante de Dios; si tienes un corazón humilde y dispuesto a ser alcanzada por Él, ese encuentro tendrá significado por el resto de tus días.

Volvamos a la historia. Rahab esconde a los espías de Israel y ellos logran salvar su vida. Así que Rahab solicita una especie de “trato”. Así como ella salvó sus vidas, ellos debían salvar la de ella.

No podemos saber qué fue lo que hizo que Rahab se volviera prostituta. No sabemos si tenía heridas en su corazón. Mi razonamiento me dice que si las tenía; un corazón sano nunca podría disponer su cuerpo al placer de otros. No sabemos cómo era su familia ni el trato que tenía con ellos.

No puedo imaginar a Rahab teniendo una familia unida siendo prostituta. Cuando yo me encontraba en pecado sexual, era muy difícil disfrutar con mi familia en paz. La vergüenza me impedía relacionarme con ellos de forma agradable. Quizá esta vergüenza también estaba en Rahab.

Sin embargo, el acuerdo que hizo con los espías incluía la salvación y protección de su familia.

Ahora júrenme por el Señor que serán bondadosos conmigo y con mi familia, ya que les di mi ayuda. Denme una garantía de que, cuando Jericó sea conquistada, salvarán mi vida y también la de mi padre y mi madre, mis hermanos y hermanas y sus familias. Josué 2:12-13 NTV

¡Qué conmovedoras palabras!

Querida amiga, si has encontrado salvación para tu vida; no olvides a tu familia. La salvación que te ha alcanzado, también puede alcanzar a los tuyos. La nueva oportunidad que Dios te ha dado puede extenderse a tu familia.

Dios te ha dado una oportunidad de empezar nuevamente; ¿te animas a darle esa misma oportunidad a tu familia?