Comentamos en notas anteriores sobre el libro A Billion Wicked Thoughts, un estudio exhaustivo de los hábitos de consumo de pornografía en Internet. Según éste libro, el segundo género más buscado en Internet, tiene que ver con situaciones en las cuales los actores representan una infidelidad. El libro incluye un listado de las palabras más usadas para googlear este material. Basta decir que estas búsquedas incluyen sexo grupal, relaciones con desconocidos y las situaciones en las que un “matrimonio” invita a una tercera persona a su cama. Estos son temas que la Biblia no se avergüenza en tratar y definir como pecados. En la Biblia se menciona a personajes que cometieron estos pecados y las consecuencias que tuvieron. Esta también es una lucha para el cristiano de hoy que está atado al consumo de pornografía.

La Biblia es suficiente para limpiar pensamientos específicos y cambiar conductas puntuales. Un cristiano necesita aplicar las Escrituras de manera muy específica si está luchando con una atracción muy específica.

Dejar un pecado involucra arrepentirse del mismo, confesarlo con un cristiano maduro y cortar con el acceso a éste. Sin embargo, en esta nota nos enfocaremos en una estrategia puntual: Usar la Palabra de Dios para renovar la mente.

¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra. Con todo mi corazón te he buscado; No me dejes desviarme de tus mandamientos. Salmos 119:9-10 RV

Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo. 2 Corintios 10:4-5 RV

¿Cómo podemos entonces aplicar las Escrituras para limpiar el deseo por los temas de infidelidad?

Cultiva el valor de la fidelidad matrimonial

Mucho se habla ahora sobre valores, pero en su definición más sencilla un valor es algo que es un tesoro para ti.

Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón. Mateo 6:21 NVI

Si tu tesoro es tu carrera académica, pondrás allí todo tu corazón para hacer una prioridad tus estudios (no estoy diciendo que sea algo malo, es sólo un ejemplo). Si tu tesoro es el ahorro, o el rescate de perros de la calle, pondrás allí todo tu corazón y tu energía hasta lograrlo, ¿cierto?

Pero, ¿realmente es para cada uno de nosotros un tesoro la fidelidad? Y si la respuesta es negativa, ¿cómo podemos cultivar este valor hasta que verdaderamente consideramos un tesoro el ser fieles?

Aprende a ser fiel sin importar tu estado civil

Hablar de fidelidad y matrimonio no es sólo para los hombres casados. Ésta es una conversación que debería darse en todos los ambientes de una iglesia. Si eres soltero, si no estás en una relación o si estás en un noviazgo, si eres divorciado o viudo, o si estás luchando contra la homosexualidad, ésta conversación también es para ti.

Medita en los pasajes sobre fidelidad

Busca en la concordancia de tu Biblia (o con algún medio tecnológico) lo que la Palabra de Dios dice sobre los actos sexuales que has visto. Pero más importante, todo lo que la Biblia dice sobre las bendiciones de la fidelidad. Suscríbete a un devocional diario sobre el tema. Memoriza estos versículos, y medita constantemente en ellos. Para mí, la forma más práctica de meditarlos es personalizándolos con mis propias palabras:

“Señor, ayúdame a dejar las obras de oscuridad, y a repudiar mi deseo por las orgías, la inmoralidad y el libertinaje. Me revisto del Señor Jesucristo, y de la armadura de luz que tu Palabra menciona.” (Rom 12:12-14), “Señor, ayúdame a considerar el matrimonio como algo valioso” (Heb 13:4), “Señor, quiero mostrar que disfruto sólo a mi esposa, o que me preparo para hacerlo así cuando me case. (Prv 5:15-16) Ayúdame a no desperdiciar ese deseo viendo pornografía.”

Exponte a enseñanza sana sobre matrimonio

Tengo un amigo que hizo parte de su recuperación del consumo de pornografía el asistir a seminarios matrimoniales. Puedes leer libros sobre el valor del matrimonio (te aconsejo empezar con un libro que hable sobre complementariedad bíblica). Pon atención especial a la predicación en la iglesia sobre el tema. Busca consejería matrimonial.

Cultiva amistades que valoren el matrimonio

Si estás rodeado de gente que es infiel o que le huye al matrimonio, probablemente su compañía alimenta tu consumo de pornografía.

¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que «Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres. 1 Corintios 15:33 TLA

Necesitas ser intencional en cortar con estas relaciones. Pero aún más, necesitas incluir en tu círculo cercano a otras personas que demuestren que valoran la fidelidad. Especialmente si eres soltero, forma amistad con un hombre casado que  pueda enseñarte a ser fiel. Si eres casado, rodéate de otros hombres que fieles a su esposa y que puedan enseñarte a ti a serlo. Enfócate en identificar las bendiciones de la fidelidad en el matrimonio de estos amigos.