Las fiestas de fin de año son generalmente consideradas como una temporada de potenciales recaídas para cualquier adicción, y la adicción sexual no es la excepción.

¿Por qué es la temporada festiva un tiempo especialmente complicado? Se nos dice inmisericordemente en la televisión, en el cine, en el lugar de trabajo y en la escuela que esta época del año es la más divertida, espiritual, emocionante, íntima, etc. Pero en realidad, para muchas personas puede disparar una intensa necesidad de escapar a través del pecado sexual porque:

  1. Nuestra experiencia familiar real no encaja con la familia ideal que se supone que deberíamos tener. Tal vez no acostumbramos pasar esta época con nuestra familia o no queremos hacerlo, o cuando lo hacemos se vuelve algo doloroso o saca a luz recuerdos antiguos y tristes.
  2. Sentimos la tremenda presión de crear la experiencia perfecta, comprar los regalos perfectos, ser los anfitriones perfectos, etc.
  3. No tenemos el dinero este año para comprar lo que quisiéramos poder regalar.
  4. Nos invitan a fiestas en el trabajo, o a compromisos familiares o sociales a los que se espera que vayamos aunque no queramos asistir.
  5. Hay un tremendo incremento en el nivel de conductas enfermizas – consumo de alcohol y azúcar, glotonería, uso de drogas, desvelos, falta de ejercicio, etc. –y todo esto contribuye a un ambiente de excesos y conductas adictivas. Adicionalmente, el consumo de alcohol puede servir como desinhibidor y permitir que te involucres en actividad sexual promiscua.
  6. Algunas personas no sienten una conexión espiritual con las fiestas o no las celebran como parte de sus mismas creencias cristianas. Ésto puede crear una experiencia de ser un “extranjero” entre sus mismos amigos y de aislarlos de los demás.
  7. Hay una tremenda presión por tener una “relación” o ser parte de una “pareja” en fin de año, y por hacer de las fiestas algo romántico. Esta presión puede ser tremenda y puede conducir a activar la compulsión sexual o la adicción al romance.
  8. A pesar de toda la presión y expectativas, se espera que estemos relajados, felices y en “modo vacaciones”.
  9. Debido a que la presión para sentirse feliz y conectado con otros es tan intensa, el impulso de tener sexo promiscuo o compulsivo puede convertirse en un seductivo sustituto de la intimidad genuina con la gente que amamos.

¿Cómo evita un adicto sexual una recaída durante las fiestas? Los siguientes son algunos consejos para mantenerte a salvo y sobrio:

  1. No te aísles. Planifica tus días y deja saber a la gente dónde estás .Planifica pasar tiempo con la gente que forma parte de tu sistema de apoyo y que tienen un estilo de vida sano. Crea rutinas para ti mismo para que no termines con muchísimo tiempo libre.
  2. Mantén tus pensamientos anclados en la realidad. Visualiza antes de tiempo cómo será esa fiesta o ese viaje basado en tus experiencias reales y no en una fantasía. Si aceptas que muchas cosas saldrán mal en las fiestas, estarás listo para reparar, improvisar y solucionar de tal manera que pases un tiempo verdaderamente feliz.
  3. Toma cuidado adicional de ti mismo. Mantén tu rutina de ejercicio, tus buenos hábitos alimenticios, y mucho descanso. Trata de permanecer consciente acerca de lo que consumes en comida y licor.
  4. Sé creativo para regalar. Piensa en regalos simples que puedas hacer por ti mismo o que puedas pagar, o dona tu tiempo de voluntariado en nombre de alguien más. Ofrécete como voluntario y ve con alguien que te necesita a ti como regalo.
  5. Haz un plan B. Necesitas preparar un plan de escape mucho antes de que encuentres una situación vulnerable o una situación el a que la oportunidad para recaer esté frente a ti, como salir a caminar, llamar a un amigo o leer algo que te distraiga.
  6. Encuentra nuevas formas de celebrar. No necesitas tener sexo para estar contento, ni recurrir a la masturbación, al sexo fuera del matrimonio o a la prostitución para darte un premio o regalo a ti mismo por un año bien trabajado.
  7. Obtén apoyo. Lo más importante, busca la ayuda que necesitas durante esta época, ya sea de la gente que amas, de reuniones grupales, de terapia o consejería, o amigos que conocen de tus luchas y que realmente pueden estar allí para ti. Comparte tus emociones y tus necesidades con ellos.
  8. Renuncia a la tentación de revivir cualquier relación ya terminada con tal de sentirte acompañado; es injusto para ti y para la otra persona jugar de esta manera. Comenta con otros esta tentación y busca mantenerte conectado con relaciones que sí están vivas y sanas HOY.

Recuerda, la tentación sexual pasará. A veces puede ser útil sólo recordarte a ti que esas conductas realmente nunca te hicieron feliz durante las fiestas en años anteriores y que sólo te hacían sentir terrible después. La tentación es como una ola que alcanza su máximo tamaño en intensidad, pero tiene que diluirse y perder fuerza.

Así que sométanse a Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes. Santiago 4:7 NVI

Si puedes resistir, te sentirás un paso más libre lejos de los patrones destructivos que te han arrastrado en el pasado, y un paso más cerca de una vida más rica y en verdad feliz.